Así pues, me permito interrogar públicamente a Pepe Blanco sobre algunas cuestiones que él nunca explica en sus reiteradas comparecencias. Hace dos años todos los gobiernos, incluido el nuestro, señalaban con el dedo acusador a los verdaderos culpables de la grave crisis que nos asola - la gran banca y los especuladores financieros-, y por doquier se escuchaban voces autorizadas que reclamaban nada menos que la refundación del capitalismo, la necesidad de meter en cintura a los mercados financieros o el fin de los paraísos fiscales. ¿Por qué todo ello ha desaparecido de repente del debate público? ¿Por qué razón los excesos reales de este capitalismo de amiguetes han sido sustituidos en el debate por unos supuestos e inexistentes excesos del Estado del bienestar, cuyas prestaciones, en consecuencia, es preciso recortar para salir de la crisis? ¿Cómo es posible que el Gobierno haya aceptado este burdo cambio de escenario?
Anxo Guerreiro, no seu artigo Preguntas a José Blanco en El País